lunes, 5 de septiembre de 2011

lunes, 18 de julio de 2011

CORRUPCIÓN EN COMUNICACIÓN SOCIAL DE LA CAMARA DE DIPUTADOS

Discrecionalidad y abuso con el dinero público en Comunicación Social de la Cámara de Diputados

-          Una auditoría a la gestión, revelaría a los probables  “aviadores”, recomendados, compadres y parientes beneficiarios de la nómina de Comunicación Social
-          No es la primera vez que MUNDO LEGISLATIVO documenta los abusos que se cometen en el área, con el conocimiento o permisividad del Presidente de la Mesa
-           Una “nueva” revista, con una inversión desconocida es una “idea” del  diputado  Jorge Carlos Ramírez Marín, se deslinda el coordinador del área

Por Francisco Ramírez/ MUNDO LEGISLATIVO 

La nómina “para los cuates”.

O como decía el “Tlacuache” Garizurieta: “vivir fuera del presupuesto, es vivir en el error”, porque si nos atenemos a lo que viene a continuación, usted verá que mientras  más de la mitad de la población de este país se debate entre la pobreza y la miseria, el hambre y la enfermedad, en el Congreso el dinero corre como rio impetuoso a los bolsillos de unos cuantos afortunados.

La Coordinación de Comunicación Social de la Cámara de Diputados, habría hecho un uso discrecional del dinero público asignado a esa área, según revelan documentos internos que demostrarían el abuso en pagos, puestos y nóminas, creando un gran “sospechosismo” de corrupción en el área.

Al parecer la transparencia y rendición de cuentas no es el fuerte de los legisladores, o más bien de sus áreas de Comunicación Social, ni de otras, claro.

No se conoce un solo informe público del área, a cargo de Miguel López Azuara, que dé cuenta de los recursos gastados, destino, resguardo de materiales, si se utilizaron y para qué sirvieron. De los estudios, encuestas y otros análisis por los que han pagado sumas millonarias; tampoco se sabe de su utilidad, destino o custodia. Se desconoce la función de los puestos asignados, y el por qué de la duplicidad en algunos de ellos, así como las decenas de miles de pesos que cobran  empleados del área y la disparidad en los pagos en los mismos puestos; o por qué, algunos “asistentes” ganan más que sus “superiores”.

Bastan algunos ejemplos para ver el despilfarro, la opacidad y la discrecionalidad en el manejo de recursos públicos, para indignarse del abuso que se comete:

De acuerdo a una relación de la Dirección Administrativa (Subdirección de Recursos Humanos y Contabilidad), de la Coordinación de Comunicación Social, en la “Relación de Contratos Global”, Presupuesto 2011, existen en una sola lista 113 Contratos relacionados con igual número de plazas y/o gatos, ¡por más de 21 millones de pesos!.
Pero no es la única. Hay más, mucho más.

Bastan unos cuantos ejemplos para que surjan las dudas del destino del dinero público: En la hoja 4 de dicha Relación, aparece el Contrato No.  CCS/DA/LXI-088/2011; pero en la columna “Nombre o Razón Social del Prestador de Servicios”,  no aparece nombre o razón social, sólo se lee: “invitación a cuando menos cinco participantes”; en la Descripción del Servicio que Realiza, dice: Monitoreo de Campañas, por un monto de $ 696 mil pesos (¡Seiscientos noventa y seis mil pesos!).

Cabe recordar que la nómina y los puestos del área de Comunicación Social de la Cámara de Diputados, están a disposición del presidente de la Mesa Directiva en turno, por acuerdo de la Junta de Coordinación Política. Siempre ha sido así.  Ahora la Mesa está a cargo del diputado Jorge Carlos Ramírez Marín. Él es quien nombra al coordinador de Comunicación Social, en San Lázaro.

Tiene la facultad, además, de designar o recomendar los demás puestos del área; promueve en la Junta de Coordinación Política, el presupuesto y campañas de difusión para prensa escrita, radio y televisión,  de acuerdo a un Plan de Trabajo que debe elaborar el Coordinador del Área, y que éste presenta en la Junta. Puede, o no, favorecer a uno o más medios de comunicación, o a ninguno. Puede o no recomendar a casas productoras, para la elaboración de las campañas.  La orden es verbal, casi siempre. Pero quien tiene la responsabilidad legal de autorizar o negar con su firma cómo, cuando, cuánto  y a quién es el coordinador del área, hoy a cargo de López Azuara.

La opacidad que reclaman los legisladores al Poder Ejecutivo; la rendición de cuentas y la exigencia en transparentar el destino de millones de pesos, generalmente la ven fuera del edificio de San Lázaro.

Los productores de Televisa o realizadores de la Páginas electrónicas de Reforma o El Universal oLa Jornada, se van a poner verdes cuando conozcan que, según esta Relación, un realizador de la revista electrónica (no dice cuál es esa “revista”), de nombre Carlos Washington Ramond Kedlhac Navarro, gana $ 247,007. 88 pesos, de acuerdo al Contrato número: CCS/DA/LXI-078/2011

Pero hay una asistente de digitalizaciónMaría del Refugio Cabrera Malo,  la cual gana poco menos que el realizador: $ 233, 623. 16 pesos, según el contrato CCS/DA/LXI-076/2011. Esa persona fue contratada en ese puesto, como muchas otras de las que aparecen en la nómina, sin que aparentemente realice dichas funciones, sino otras.
Una diseñadora gráfica con mucha suerte, Mariana Ceballos Garza,  gana $ 194,685.96 pesos, con el contrato CCS/DA/LXI-069/2011; dos periodistas muy experimentados aparecen en la nómina:Miguel Reyes Razo, como conductor con un sueldo de $ 340,700.44 pesos, según el contrato CCS/DA/LXI-084/2011; y Víctor Miguel Bárcena Díaz, como comentarista, con un sueldo de $ 311,497.58 pesos, según el Contrato CCS/DA/LXI-085/2011.
Pero hay duplicidad de contratos o máxima eficiencia, según se vea. Pero si uno es mal pensado, probablemente algún tercero podría estarse beneficiando de los contratos CCS/DA/LXI-102/2011, por un monto de $ 208.800.00 y el CCS/DA/LXI-113/2011, por la cantidad de $ 435,000.00. Ambos a nombre de una misma persona: Rosa Isela Ortíz Julián. En el primero el Servicio es por la “producción de maquetas visuales para spots de televisión con duración de 30 segundos”; y el otro el concepto es “producción y post producción de cine minuto”.

Pero algo “no cuadra” en el gasto del dinero público: casi por el mismo trabajo, de acuerdo al contrato CCS/DA/LXI-107/2011, José Armando García Rodríguez, ganó $ 199,520.00 pesos, por la producción y post producción ¡de un spot!  de radio y televisión.

Y menos “cuadra”, cuando Comunicación Social, contrata a la empresa Tres News Producciones SA de CV, para la producción y post producción de un programa de TV, por el cual se pagó la cantidad de $ 1,461,600.00, de acuerdo al contrato CCS/DA/LXI-108/2011. Es decir, casi once veces más que el mencionado líneas arriba, por hacer lo mismo.
Pero luego hay otro contrato con la empresa Flexus SA de CV, por un monto de $ 1,299,200.00 pesos, con el contrato CCS/DA/LXI-112/2011, por un raro concepto: “producción de audio para spots de radio y televisión”. No se dice para cuantos ni para cuales.

Estos contratos no se entienden, ya que  Comunicación Social cuenta con equipos y personal contratado para hacer  esas producciones, para radio y televisión, con salarios que sus pares deTelevisa les envidiarían. También podrían haber acudido al canal del Congreso, pero al parecer no se llevan bien.

Por ejemplo, hay un Coordinador de Realizadores, con el contrato CCS/DA/LXI-003/2011 por $ 238,490.34 pesos, a favor de Lauro Ariel Castillero Botello; un productor ejecutivo, Miguel Angel Mora Vargas, que gana $ 200,030.87, contrato CCS/DA/LXI-012/2011; un Director de Producción, Miguel Angel Damasso López Ramírez, que gana $ 175,217.44, con el contrato CCS/DA/LXI-014/2011; dos asistentes de realizador, Martha Liliana Hernández Caraveo yArisbeth Cardoso Astudillo, ambas con un sueldo cada una de $ 144,067.64, contratos 015 y 016; dos locutores con suerte, Liliana Soledad de León González, con el contrato CCS/DA/LXI-018/2011 y Arturo Arellano Merlín, contrato CCS/DA/LXI-019/2011, ganan cada uno de ellos $ 146,014.49: hay una guionista, Lorena Martín Arrieta, que ganará según el contrato CCS/DA/LXI-021/2011, la cantidad de $ 160,616.01 pesos.
Es decir, de acuerdo a esta Relación de la que MUNDO LEGISLATIVO tiene copia de fecha 31 de mayo de 2011, personal sí hay, muy bien pagado, para hacer producciones. Incluso existe una coordinadora de post producción, Claudia Villagrán Castro, que ganará nada menos que $ 237,273.53 pesos, según su contrato CCS/DA/LXI-094/2011.

Pero como el dinero es  público y fluye sin problema, la empresa Talento SA de CV, se llevó por copiado de DVD, $ 249,724.80, según el contrato CCS/DA/LXI-097/2011; Digital Media Monitoring SA de CV, le pagaron de acuerdo al contrato CCS/DA/LXI-101/2011, la cantidad de $ 430, 360.00 pesos; a Video Royal SA de CV, por la producción de un spot, se llevó $ 174,000.00 pesos, según el contrato CCS/DA/LXI-095/2011

Hay una familia de caricaturistas no muy afortunada, porque al parecer tres de sus miembros que aparecen en la nómina, sólo ganarán cada uno $ 48,671.56 pesos, según los contratos  024, 025 y 026 a nombre de Héctor Garduño Bahena, Mario Alberto Garduño Hernández y Ramón Garduño Hernández, respectivamente.

Decimos que no muy afortunados porque una realizadora (no se dice de qué), Patricia Flores Mendoza,  ganará $ 204, 420.21 pesos, según el contrato CCS/DA/LXI-030/2011, cinco veces más que aquellos. Pero quien no puede quejarse es el director de Cámaras, Carlos Lorenzo Huante Arrieta, que ganará $ 208,800.74 pesos, de acuerdo a su contrato 031.

También hay un asesor de estrategia de medios, Guillermo Castro Sandoval, que ganará $ 211,721.04 pesos, según el contrato CCS/DA/LXI-051/2011; dos ¡asistentes! operativos de Relaciones Públicas, con un sueldo cada uno de $ 136, 280.23 pesos, Lázaro Espinosa y Marco Antonio Esquivel, con los contratos 052 y 053, respectivamente.
A un mes de que los directivos dejen sus puestos,  el 23 de junio pasado, se anunció que a fin de promover los análisis e investigaciones de los centros de estudio, la Cámara de Diputados pondría en circulación una revista llamada “Cámara”.
No se dijo qué circulación tendría ni el monto que se gastaría en la publicación.

Mucho menos los sueldos de los responsables que la dirigirán, colaboradores, diseñadores, redactores, correctores; tampoco se dijo públicamente el lugar y el monto de su impresión.

Consciente de esa “laguna” informativa sobre el monto de recursos públicos destinados a ello, durante la presentación, el coordinador de Comunicación Social de la Cámara de Diputados, Miguel López Azuara, advirtió de inmediato  que la idea provino del diputado presidente de la Mesa Directiva,Jorge Carlos Ramírez Marín.

Aseguró que hay mucho trabajo académico en los centros de estudios, “por lo que el presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de diputados, Jorge Carlos Ramírez Marín, presentó la propuesta de hacer la revista” (Nota N°. 5740 de CS). Y la cantidad que se destina debe ser millonaria.

El director de la revista será Camilo Kawachi, quien zalamero dijo: “La experiencia y sensibilidad que el diputado Ramírez Marín ha acumulado en una larga y enjundiosa trayectoria, le permiten aquilatar la valía del insumo que aportan los centros a la labor legislativa”.

Pero la Relación de Contratos Global, revela algunos detalles de lo que se pagará a los participantes en dicha publicación. Son la envidia de sus pares en medios de comunicación. Por ejemplo, una coordinadora editorial, María Luisa Gerardo Castro, con el contrato CCS/DA/LXI-064/2011, ganará $ 243,357.51 pesos; un redactor, Rodrigo Enrique Mendoza Reyes, ganará $ 76, 414.21 pesos (¡ni los del diario Reforma!); un co-editor de publicaciones, Nadia Salazar Anderson, contrato CCS/DA/LXI-068/2011, tendrá un envidiable sueldo de nada menos que $ 194,685.96 pesos; ¡un asistente! De información y coordinación, María Arlensiu Peraza Pech, ganará $ 194,685.96 pesos, según su contrato CCS/DA/LXI-074/2011.

Por si aún no está indignado, hay  muchos más sueldos de más de doscientos mil pesos en el área, solamente de Comunicación Social.

Otros ejemplos más: Carlos José Blanco López, editor de publicaciones con $249,684.80, contrato CCS/DA/LXI-075/2011; Ligia Eleonor Plácido Leal, controladora de información y registro $ 243,357.51 pesos, contrato CCS/DA/LXI-077/2011; Adriana del Rosario Barba Casillas, coordinadora de invitados especiales $247,007.88 pesos, contrato CCS/DA/LXI-080/2011; Andera Calvo Carrillo, verificador de contenidos $ 236,360.96 pesos, contrato CCS/DA/LXI-081/2011.

Y más, hay mucho más. Como el destino de millones de pesos que se llevarán los responsables de área en la Coordinación de Comunicación Social, durante y al finiquito de su encargo; el destino de recursos públicos en campañas o producciones de las que aún no se conocen su utilidad o impacto, entre otros rubros.

Apenas el 28 de junio pasado, el propio presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados,Jorge Carlos Ramírez Marín, al hablar de transparencia sostuvo que los miembros del gabinete del PAN que renuncien deberán y “rendirán cuentas”. ¿Los que se van, no deberían de rendir cuentas? Se le preguntó al diputado yucateco. -Las rendirán, no tengo duda de eso, las rendirán, ante el público al que pretendan convencer; sus logros hablarán por ellos; segundo lugar, la Cámara de Diputados va a estar muy atenta, a través de la Auditoría Superior de la Federación, de analizar los resultados de estos secretarios. Respondió.

Tal vez convendría que el diputado Ramírez Marín, pidiera si no a la Auditoría Superior, si a la Contraloría interna, una auditoria a su área de Comunicación Social, porque como se ve, el dinero público cuyo cuidado, transparencia, eficiencia y rendición de cuentas  reclaman, no se da en casa.

Esto es sólo una muestra de la nómina.

Pero hay aún más para indignarse, o alegrarse, según sea el caso.

Por ejemplo: Los millonarios recursos destinados a otras producciones externas; la nómina de los mandos de primer y segundo nivel en la Coordinación, que revela sueldos que no se cobrarían fuera de la Cámara de Diputados;  el enorme costo de la realización de las publicaciones; lo que recibirán los funcionarios y empleados de Comunicación Social, cuando se vayan el 1 de septiembre próximo, al relevo del Presidente de la Mesa Directiva; así como el destino de decenas de millones, en el pago de campañas.

Hay mucho más.